El primer día del dispositivo de tráfico de Festa Major, que durante el largo fin de semana desvía el transporte público por las calles Arquímedes y Galileo, se saldó ayer con menos retenciones de las habituales. El tráfico fue intenso, especialmente en las horas punta –a las 8,30 de la mañana, entre las 13 y las 14 horas y partir de las 6 de la tarde–, pero durante el resto del día la circulación fue bastante fluida. Algunos conductores siguieron las recomendaciones municipales de circular por las rondas.
Una de las claves de la mejora en Arquímedes y Galileo fue la nueva señalización. Este año queda un carril libre para los vehículos y el segundo es compartido con el transporte público. Las paradas del autobús son algo más amplias para dar cabida a varias líneas y evitar así el bloqueo de la calle por las esperas..
Cuarenta agentes de la Policía Municipal se ocuparon ayer de estimular la fluidez del tráfico y recomendar las rutas alternativas en la Rambleta del Pare Alegre, en la plaza de las Magnòlies en el cruce de Rambla con el Passeig del 22 de Juliol.
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